martes, abril 22

Oh, no! esos malditos rulos

Decidí que voy a cortarme el pelo y quizás hasta me atreva a hacerme alguna cosa extraña también. Flequillo no, porque no soy apta para flequillo y ya tuve suficiente de eso cuando mi mamá decidía sobre mi persona, pero quién te dice. Generalmente voy a la peluquería a hacerme este tipo de cosas cuando tengo ganas de matar a alguien y cuando salgo tengo ganas de que alguien me aniquile y me explique cómo pude permitir que me hicieran una cosa así.

Pero no importa, después crece.

Lo que me lleva a querer cortarme el pelo ahora no es la irascibilidad, sino algo que me tiene muy intrigada y que me gustaría resolver. Pero bueno, ahora hay que esperar.

Untando una pedazo de gruyère con miel (ohhhhhhh!), pensando de pronto en cosas que hacer: comprar una cubetera porque mi nombre empieza con "C" (así resolvimos para la despedida de Anita) y de paso también Raid para las cucarachas; sacar turno con Blanquita; enmarcar la pintura que me regaló Carlos; y mañana curso otra vez.

1 comentario:

Anónimo dijo...

te habrás cortado el pelo nomás?