sábado, abril 19

2 comentarios:

Anónimo dijo...

la flor encendida en tus colores preferidos, la exótica curvatura que sigue cada uno de los pelos, el mar sin escalas, sobre ni debajo, la radiografía del sombrero, el gesto tan bien capturado, esa sonrisa de ojos tristes...
pero no.
no, señor.
lo que realmente me puede es ese pie, y ese pie, y ese pie...y el gatito, y el pez sobre el hombro.

Anónimo dijo...

El pez lo compró en el barrio chino