martes, abril 28

Peek-a-boo

Caro dice: acá hay alguien en casa esperándote, eh
T dice: ah sí? quién?
T dice: dame una pista
Caro dice: ehhh
Caro dice: no controla esfínteres
T: ...
Caro dice: no tengo abuelos
T y Caro dicen: Lola
T dice: jajajaja
Con el dedo índice, como Harvie Krumpet, intentando tocar otro dedo índice a modo de saludo.

Tocar a otra persona índice con índice es sinónimo de intento de comunicación, como una especie de son de paz o shalom para decir me caés bien, mirá que grosa, te toco el índice con el mío.

C: hey (tocando un índice ajeno)
T: ...
C: ...
T: qué me dijiste?
C: te estaba saludando
T: *ah*
T: pensé que me estabas hablando en morse

My family is a freak show without the tent II

Caro: che, lulu, vos tenés piojos todavía?
C: porque me pica la cabeza
Lulu: sí
L: los tengo desde el colegio
L: pero ya encontré la solución, eh
L: pichu y la flogger ya lo hicieron y les dio resultado
C: ah sí? qué hicieron?
L: se pusieron la pipeta para las pulgas
C: ...
L: qué
C: me estás jodiendo
L: no, en serio, me dijeron que da resultado posta
L: pero si yo me la pongo, vos también te la tenés que poner
L: porque sino se bajan de mi cabeza y se suben a la tuya
C: estás loca
C: loca-loca
L: qué
L: después no me digas que no te dije, eh

domingo, abril 26


T se ríe mucho. Se ríe (mucho) de sí mismo + de mi + conmigo. Le gusta el café batido y cantar en el auto. Me deja manejar a Harpo. Me avisa si me olvidé de ponerme el cinturón de seguridad. Me presta sus libros y su pijama y me cuenta buenos cuentos. Me mira fijo hasta que nos convertimos en cíclopes. Se ríe si lo miro seria. Si le pido que no se afeite deja que pasen algunos días hasta volverse a afeitar. Le gusta el mar. No le importan mis callos (creo que hasta le divierten, en un punto). Tiene lindas manos y (definitivamente) las sabe usar. Me abraza tipo pulpo y no me deja respirar. Si no necesitamos hablar no nos importa nada, nos tiramos a dormir. Tiene destreza en el arte de mimar. Inventa palabras (y apodos). Y respuestas. No le importa si me pongo nerviosa o me vuelvo torpe, me muerdo el labio y no puedo hablar.

Todavía no sé si le gusta cocinar. Cuenta mis lunares.

Da buenos besos y no me deja respirar.

Pero después respira profundo, bien profundo, y vuelve a empezar.

jueves, abril 23

Surrealismo

Hoy a la mañana bañándome sin luz, el sol entrando por la ventana de vidrio opaco, los ojos acostumbrándose al día. Después el desayuno servido en la mesa blanca. Algo está cambiando. Estos días, al menos. Mientras tanto, raspaba lo que quedaba del dulce de blueberries y la acariciaba a Luna con el pie. Terminar un frasco me da siempre esa sensación de victoria y justicia divina. Como que las cosas fueron diseñadas para cumplir un ciclo y de alguna manera uno contribuye en la ejecución de ese plan divino. Terminar la mermelada, ponéle.

Es muy loco porque viendo las cosas en macro uno se da cuenta que en realidad se trata de una gran red de gente haciendo cosas, relacionándose y raspando lo que queda del frasco. Mientras uno está haciendo cosas acá, hay gente haciendo las mismas cosas en otros países, o haciendo no sé, equis cosa. Uno casi siempre se olvida de eso. Gente teniendo vidas en otros lugares, cruzando veredas, y bañándose también con la luz apagada para que los ojos se vayan acostumbrando al día.

Es tan importante conocer otros lugares, viajar. Cagarse de frío y darse cuenta de que puta madre, esto es el frío en realidad. Viajar te abre tanto la cabeza. Uno se siente más vivo, no sé. Desde un avión se ve tan claro. Cuando estás llegando a una ciudad y son todas luces y autos. Como telas de araña que se van tejiendo, gente que se va conociendo y va decidiendo, y así, indirectamente, sin quererlo, va cambiando la historia de los demás.

En la estación me puse los headphones y mientras escuchaba a Janis Joplin, que en el fondo tanto-tanto no me gusta, pero bueno, Concho-María me metió un poco de su música en mi ipod y yo se lo agradecí. Mientras escuchaba a Janis y esperaba que T me llamara (me dijo que no tenía señal, pero que eventualmente me llamaría) se me acercó Marcos Hilding Ohlsson para darme una propaganda sobre su candidatura a concejal en San Isidro (me di cuenta que era él porque la propaganda venía con su foto). Me dio la mano, y me dijo que le preguntara todo lo que quisiera y me pareció TAN surrealista. Doblé el papel en dos y lo guardé en el bolsillo. ‘Después me fijo, gracias’, le dije. Pero por adentro pensaba, esto es tan surrealista, Marcos.

Hoy me voy a cortar el pelo, Marcos.

domingo, abril 19

viernes, abril 17

To my beloved Wilson


Mirá, te escribieron un libro y todo.

jueves, abril 16

Nappy

Sur les marches, on se promettait de se revoir l’été prochain. À Paris, qui sait ? Quelqu’un laissait un message sur un répondeur, trop tard. On tournait la clef. L’été s’achevait et j’avais la sensation physique, indubitable, que quelque chose se mourait en moi aussi. Quelque chose qui me rendait triste et vivant à la fois. Comme une joie trempée de larmes.

Au jourd'hui je ne suis pas in the mood. La premier fois desde que volví.

J'ai vérifié mon biorythme, et les prévisions pour demain et le jour suivant sont réservées.

Et je ne sais pas deuil en francais.

miércoles, abril 15

On airhostesses: pasta o poio

La ducha a la mañana no fue (tan) buena idea. Tampoco ponerme sandalias. Que frío por Dios. Oh, por Dios. Qué frío.

Tampoco fue buena idea el seminario de medio ambiente y el jugo de naranja después del café con leche. Te provoca malestar estomacal.

Qué aburridos estos eventos. Alguien lo tiene que decir. No entiendo todavía bien a quién estaban estafando hoy. Seguramente a la pobre Carmela, que fue gratis pero tuvo que escuchar sobre las bondades de los vehículos híbridos de Toyota y las preguntas estúpidas de los asistentes, 'cuándo van a limpiar el Riachuelo?'. NUNCA.

Después hay varias cosas que me irritan muy especialmente en estos eventos.

En primer lugar y con ventaja, las promotoras vestidas de arbolito de navidad. No entiendo cómo no se cagan de frío y cómo no se aburren de estar paradas y de abrir la puerta. A estas las llamaban azafatas, lo cual me irritó más todavía porque ni siquiera tenían el physique du rol.

- 'Disculpáme, no sabés a quién le puedo pedir el material?'
- 'Se los tenés que pedir a la azafata'

Todo el mundo sabe que las únicas azafatas son las que se pasean por los aeropuertos y te reparten las bandejitas al son de "pasta o poio?" mientras empujan su fantabuloso carrito de comida en el pasillo del avión.

En segundo lugar, me irritan los cartelitos de identificación. Primero porque no me interesa hablar con nadie. Y segundo porque no me interesa hablar con nadie.

Me pasé gran parte de la mañana intentando prestar atención, pero había una chica embarazada al lado mío que se tocaba la panza y tuve una sinapsis con Lola que me hizo pensar en todos los lugares que voy a tener que mostrarle, sinapsis-foto con la peluca del otro día-sinapsis-Flash.

Flash me mandó un mensaje el lunes para decirme "mañana tenés tu primer clase de fotografía".

- "mañana no puedo, el jueves?"

Entonces mañana empiezo mis clases recopeishon de fotografía con Flash (nadie más le dice así).

Antes de irme de vacaciones lo llamé para preguntarle por una lente que me quería comprar.

- Hola, Flash?
- ...
- Vos no sos Flash?
- Quién sos?
- La hermana de S
- Ah, qué hacés Caro
- Bien. Pero no te decían Flash?
- Eh.. no-
- Bueno
- En realidad me llamo Martín
- Ah
- Todo bien, igual

martes, abril 14

Alsace & Lorraine

Yo le dije. Soy la más grosa porque cociné una quiche lorraine con la receta que me dio ma prof de francais y quedó impresionante, PAPÁ.

Y no, no le puse cebolla. Si le ponés cebolla se convierte en alsacienne. Y sólo queríamos panceta.

Todo muy kitsch.

En este párrafo vamos a explicar los porqués. El por qué principal es la falta de tiempo, que amenaza todo el tiempo con obligarme a dejar las cosas por la mitad, con convertirme en una isla y dejarme sola sin amigas y sin familia y sin hijos, quejosa, insoportable y merecedora de males asociados. El domingo llegué a casa después de haberme ido a la playa, y todo lo que hice fue vomitar. Vomitar en la vereda de mi madre todo mi almuerzo, riñones y zanahoria con huevo y mayonesa. Después Luna trató de quedarse conmigo y de acompañarme porque me dolía la cabeza y estaba toda contracturada, pero no la dejé entrar a mi cuarto. Estuvo toda la noche arañando la puerta y desde la cama le grité y la amenacé con tirarla por la escalera. Terminé levantándome y arrastrándola hasta el pasillo, loca, sacada y nauseosa.

El segundo por qué es el laburo que cada vez exige más y reditúa menos. Dejó de ser una relación simbiótica para pasar a ser un parásito que me chupa la sangre y las ganas. Cuando me desborda y estoy cansada y tengo ganas de patear, tengo locuciones internas en las que renuncio mentalmente y soy feliz. Después agarro una caja y guardo mi sacapuntas eléctrico, mi resaltador violeta, el búho y el hombre de las nieves que me vino en el kinder sorpresa una vez (que también hace de hombre de la bolsa o de señor de los pinos largos, conforme a la ubicación).

El tercer por qué es T, que me mantiene despierta hasta altas horas de la noche, junto con Dottie ayer, y junto con Tao Lin a quien hemos adquirido recientemente y de quien sólo hemos leído el primer cuento. También las cosas que pintaremos y las clases de fotografía que comenzaremos el jueves en la estación Acassuso. De más está decir que de este tercer punto nunca me voy a quejar.

Me muero muerta antes de eso.

lunes, abril 13

miércoles, abril 8

Lol-ah



1. En las últimas semanas aprendió a aplaudir.
2. Le están creciendo rulos.

Se nota que está en los genes.

martes, abril 7

Posible título de futura cosa que quizás escriba

My family is a freak show without the tent.

- 1000 characters
- quotations
- illustrative pics


lunes, abril 6

Make chocolate cake, not war



Contenta de volver. El frío ya me estaba congelando el trasero, los dedos del pie y el cerebro (ya no podía pensar). Tomé tanto café que de a ratos me latía justo abajo del ojo. Feo, qué querés que te diga. De lo más feo y horrible. Una sensación de mutación inminente que no me gustaba para nada. Además los últimos días estábamos en un hostel, que está muy bien para conocer gente de otros lugares y ahorrar, pero está muy mal si querés bañarte con agua caliente de corrido, si querés moverte con total libertad en el cuarto, si la gente que vive en tu cuarto no se baña y huele mal y last but not least la parte que todos conocen y de la que nadie quiere hablar: si necesitás hacer caca (mi hermana se horroriza cuando no uso eufemismos, pero insisto en que las cosas hay que llamarlas por su nombre).

Lo bueno de volver a casa es mi cama y mi baño. Y mi ropa limpia con olor a vívere Bamboo.

La síntesis:

Canadian facts

1. Hace demasiado frío. Tanto tanto frío, que tienen una ciudad subterránea con negocios y todo. Los autos tienen asientos que se calientan. Todas las casas tienen sótanos.
2. La gente se saca los zapatos cuando entra a su casa. No importa la edad, ni la clase social, si son parientes o amigos. Todos. Todos, todos se sacan los zapatos y circulan en medias y esperan que uno también lo haga.
3. Tienen una cadena de cafeterías que se llama Tim Hortons (el café es muy feo, pero tienen unas donuts muy ricas que se llaman timbits). Por estos días había un concurso y estaban todos rolling up the rim para ver si se ganaban algo. El mío decía que siguiera participando.
4. Maple syrup. Blueberries, blackberries, raspberries. Strawberries.
5. El latiguillo es "eh?" pronunciado "ey". Por ejemplo, this maple fudge is good, eh?
6. Ice hockey & basket.
7. Took hats.
8. La gente es muy amable.

NY facts:

1. La gente sigue siendo amable, pero menos.
2. Es mentira que friends se grabó en NY. No existe Central Perk.
3. *Mucha* gente. Oh, por Dios. Basta de gente.
4. Las cupcakes son imperdibles. Especialmente las de Magnolia.
5. La rata más chica tiene el tamaño de Luna.
6. Comida picante.

El saldo es muy positivo a pesar de que perdí la guía con todas mis anotaciones.

Además me compré un par de libros muy copes. Uno de Tao Lin. Contenta feliz con mis libros nuevos. Que no prestaré.



domingo, abril 5