Intento hacer las paces conmigo misma. Sigo estando cansada a veces, me sigo escuchando decir las mismas pavadas de siempre, que me quiero ir a vivir a otro lugar, sigo siendo una persona incapaz de desenvolverse con naturalidad si hay más de seis personas en el mismo lugar, sigo siendo mala para la conversación casual, esquivo para no saludar y cada vez me cuesta más lidiar con mi papá, pero después está T que sonríe y me dice con toda la paciencia del mundo que cada vez falta menos, que ya va pasar, bucea uno a uno los clips que tengo escondidos en el pelo con absoluto cuidado de no tirar de más, mientras me escucha atento y me interrumpe sólo para decirme victorioso mirá, encontré otro más!
Maravillado, sorprendido, increíble, increíble. En el auto tengo un montón de estos, de una chica que a veces me toca llevar.
Pero después claro, me quedo pensando con la culpa Del Que Sabe En Realidad, y si debería advertirle que el chico más adorable, sociable, adaptado y genial está lidiando con la chica más hormonal, antisociable y temperamental.
martes, enero 26
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