Viajar en tres oportunidades seguidas con la misma persona desconocida en el tren es muy sospechoso.
Jueves, 08:25 am., Estación Acassuso. No me acuerdo cuál era el vagón. Chica de treintipico, morocha. Rulos definidos. Definidísimos. Con gel, o algo así. Medio duros (los rulos). Toda vestida de negro, tipo promotora.
Jueves, 18:09 pm., Estación Retiro. Vagón número tres contando desde el fondo. La chica de los rulos, leyendo un libro.
Viernes, 8:40 am., Estación Acassuso (me encontré con Lu que puteaba porque estaba llegando tarde al laburo). Esperando subir al vagón número dos (de norte a sur), la misma chica de treintipico. Los rulos igual de duros que antes. Esta vez con jeans.
C: 'Ayer viajé con esa misma chica, a la mañana, a la tarde. Loco'
L: 'Sí, a mi me pasa a veces... Se darán cuenta ellos también?'
C: 'Mmm.. no sé, pero para mi que esta está planeando algo'
viernes, noviembre 16
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4 comentarios:
En mi caso hubiera sido genial, porque empece leyendo de reojo una novela de mi compañero circusntancial de tren, y me indigné cuando tuvo que bajarse, y todavía pienso como seguirá, porque nunca volvió.
Me ha pasado una que otra vez. Yo que vos, me acerco y la saludo. Por nada, de onda.
Capaz es copada. (Igual, los rulos me gustan cuando no están tan engominadamente definidos)
Saludos, una ruluda indefinida.
Leiste a Cortazar?
La saludaría, pero soy muy tímida.
Aguanten los rulos. Yo también tengo, pero los míos son liberales y bien zen.
Hola Eileen!
Bueno, c'est tout. Saludos!
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