[Concho y Lu vinieron a tomar el té. Yo fui a atender el teléfono, que estaba en la cocina]
Yo [desde la cocina]: Cheeeeeeeeeee, el pibe de enfrente está deshojando rosas!
Entonces las tres nos quedamos en la ventana vigilando los movimientos del vecino. El vecino es gordito, y tiene un poco de cara de nabo.
Concho: Sambucettiiiiiii
Lu: Sí, Sambucetti a full.
Y lo que siguió fue un diálogo bastante desordenado:
Qué está haciendo el pibe este?
Para qué deshoja las rosas?
Porque es obvio que va a desparramar los pétalos en la cama...
Ah-
Bieeeeeeeeen, Sambucettiiiiiiii
No, no no-no, mirá! está tirando los pétalos a la basura!
Entonces les saca los pétalos viejos para que las rosas parezcan más nuevas.
Ahí tiene los floreros. Dos, tres.. Ahí tiene otro más.
Agarró una galletita del frasco. Che, se está comiendo la galletita del frasco para usarlo de florero, está bien, Sabucetti, mastique la galletita.
Qué boludo, que no tire los pétalos!-
-Es que no le importan, los pétalos, entendés, él quiere las flores, nada más.
Ajá.
Che, me da un poco de ternura el pibe. Mirálo armando los floreros.
Pone una rosa a la vez. Está indeciso.
....
....
....
Nooooooooo, sabés quién es este pibe?
QUIÉN? QUIÉN?
Nooooooooo
Quién??
Es el pibe que salió con la hermana de xxxxxxx!!!
Nahhhhhhh, en serio?
Sí!! Es medio ganso, te digo.
Estaba con fulana?
Si.
Mirá.
Y qué tiene ahí?
Es un pulverizador.
No, pulverizador no. Pulverizador es para incinerar..
Es un rociador!
Un rociador! sí!
Naaaaaaaaaaah, va a ROCIAR las rosas?
Dejáaaaate de joderrrrrrrr. Naaaaaaah...
VA A ROCIAR LAS ROSAS, boludaaaaaa!
jjjjajajajajajjajajjjjjjjja
Mirá, ahora está oliendo el rociador.. qué freak, por favor.
[cinco minutos rociando las rosas]
Bueno, qué más.
Ahí las lleva para el living. Ajá.
El otro florero lo va a poner en el cuarto.
Mirá ahí tiene otro florero más. Cuántas compró?
Y, deben ser como treinta... rosas rojas y blancas
Está bien..
Le puedo gritar?
No
Daaaaaaaale, quiero que sepa que lo apoyamos
No, ni loca, después lo tengo que ver yo. NO. Te lo prohíbo.
Bueno.
Y ahora qué hace?
Uhhhhhhhh, mirá, ahí llegó su mujer.
Le está dando un beso, no miremos.
No mirennn, no da mirar. No da mirar. No miremos, che.
......
......
Ehhh, esa mina no iba al colegio?
.....Sí? decís?
Esa mina no es xxxxx?
Siiiiiiiiiiiiiiiii
Es xxxxxxx!!!!
Se casó con este pibe???
Jajajajajajajjajjj
Qué bien Sambucetti!!
PD. To hell, and beyond (in slide)
miércoles, abril 28
martes, abril 27
Precio líder
Entre las tareas que me encomendó mi padre (me estoy dando cuenta que esto de vivir en otro lado no le impide seguir gobernándome) estaba la de cambiar la cerradura. Pedimos prestados unos destornilladores, me enseñó a sacarla y me dejó en la cerrajería que está a dos cuadras, para que pidiera el cambio de la combinación. Ahí aprendí que el precio varía de acuerdo a la marca de la cerradura, y que la mía debe ser medio pistola porque era de las más baratas.
En el interín fui al supermercado que queda cruzando la calle.
Apenas entré, me interceptó una chica que me dió un volante y me dijo que si mi tarjeta de crédito empezaba con los números del papel, era acreedora de un maravilloso premio. Yo pensé esto es muy groso, así que saqué la billetera y empecé a chequear, chocha-feliz de la vida me di cuenta que coincidía, me dije a mi misma este es mi día, y me puse a comprar las cosas que necesitaba.
Lo primero que noté en este supermercado fue que las góndolas estaban casi vacías. Y lo poco que había, era genérico. Gaseosa Pritty, soda Waikiki, pan lactal Horno Viejo... No tenían manteca..!! me tuve que ir con un pan de margarina, a regañadientes.
Aún así, yo tenía en mi bolsillo el ticket ganador que me catapultaría a la felicidad. Y como en tiempos de mudanza los sueños tienen forma de electrodoméstico, yo sabía que cuando llegara a la caja le iba a dar mi papel a la cajera y ella, con lágrimas en los ojos me iba a decir que efectivamente me había ganado un microondas, una tostadora o una minipimer.
El tema fue que cuando llegué a la caja, la chica me dijo que ella no tenía nada que ver con el papel ese, y que le daba lo mismo si le pagaba con tarjeta o en efectivo, lo cual me desconcertó un poco.
Así que pagué y me acerqué a la chica de la puerta, le di mi papel y le dije: hey, me coincide!, entonces la mina me sonríe (con sonrisa grande que se te ven las encías), onda NO-LO-PUEDO CREER, me apoya una mano en el hombro emocionada y me dice vení, vení, poné tus compras acá en la mesa, porque (y ahí yo pensé listo, me gané un auto?? qué me gané?? eh?? QUÉ ME GANEEEEEEEÉ?) vos tenés celular con abono?
Es difícil escribir la desilusión. Y las ganas de matarla.
Junté mis bolsas y mientras ella dibujaba en un papel una familia de números con forma de cajita que iban a poder hablarse gratuitamente, le dije DEJÁ, GRACIAS, NO ME INTERESA.
Pero ella insistió, hasta que le dije YO HABLO GRATIS CON TODO EL MUNDO, NO QUIERO QUE ME REGALES NADA.
Por adentro, claro, sintiéndome una naba, como es posible que me haya embaucado así, cómo no la vi venir, cómo no me di cuenta de que había más de 15 combinaciones de números posibles y que toooooooodas las tarjetas de crédito empuezan igual, eh??, EH?
Y que ADEMÁS estaba en Leader Price!
T: Negra, no le cuentes a nadie que fuiste a Leader Price, porque te van a echar del Old Girls Association.
C: Pero fui porque me quedaba a dos cuadras, y porque estaba en frente a la cerraj-
T: -Igual.
C: Está bien.
T-C: jajajjajjaja
En el interín fui al supermercado que queda cruzando la calle.
Apenas entré, me interceptó una chica que me dió un volante y me dijo que si mi tarjeta de crédito empezaba con los números del papel, era acreedora de un maravilloso premio. Yo pensé esto es muy groso, así que saqué la billetera y empecé a chequear, chocha-feliz de la vida me di cuenta que coincidía, me dije a mi misma este es mi día, y me puse a comprar las cosas que necesitaba.
Lo primero que noté en este supermercado fue que las góndolas estaban casi vacías. Y lo poco que había, era genérico. Gaseosa Pritty, soda Waikiki, pan lactal Horno Viejo... No tenían manteca..!! me tuve que ir con un pan de margarina, a regañadientes.
Aún así, yo tenía en mi bolsillo el ticket ganador que me catapultaría a la felicidad. Y como en tiempos de mudanza los sueños tienen forma de electrodoméstico, yo sabía que cuando llegara a la caja le iba a dar mi papel a la cajera y ella, con lágrimas en los ojos me iba a decir que efectivamente me había ganado un microondas, una tostadora o una minipimer.
El tema fue que cuando llegué a la caja, la chica me dijo que ella no tenía nada que ver con el papel ese, y que le daba lo mismo si le pagaba con tarjeta o en efectivo, lo cual me desconcertó un poco.
Así que pagué y me acerqué a la chica de la puerta, le di mi papel y le dije: hey, me coincide!, entonces la mina me sonríe (con sonrisa grande que se te ven las encías), onda NO-LO-PUEDO CREER, me apoya una mano en el hombro emocionada y me dice vení, vení, poné tus compras acá en la mesa, porque (y ahí yo pensé listo, me gané un auto?? qué me gané?? eh?? QUÉ ME GANEEEEEEEÉ?) vos tenés celular con abono?
Es difícil escribir la desilusión. Y las ganas de matarla.
Junté mis bolsas y mientras ella dibujaba en un papel una familia de números con forma de cajita que iban a poder hablarse gratuitamente, le dije DEJÁ, GRACIAS, NO ME INTERESA.
Pero ella insistió, hasta que le dije YO HABLO GRATIS CON TODO EL MUNDO, NO QUIERO QUE ME REGALES NADA.
Por adentro, claro, sintiéndome una naba, como es posible que me haya embaucado así, cómo no la vi venir, cómo no me di cuenta de que había más de 15 combinaciones de números posibles y que toooooooodas las tarjetas de crédito empuezan igual, eh??, EH?
Y que ADEMÁS estaba en Leader Price!
T: Negra, no le cuentes a nadie que fuiste a Leader Price, porque te van a echar del Old Girls Association.
C: Pero fui porque me quedaba a dos cuadras, y porque estaba en frente a la cerraj-
T: -Igual.
C: Está bien.
T-C: jajajjajjaja
lunes, abril 26
La inauguración (The baptism)
Finalmente me mudé este sábado. El saldo fue:
1. Se nos rompió el auto mientras lidiábamos con los fleteros australopithecus. En ese momento bisagra, T se quedó a esperar la grúa, y yo me fui a vérmelas con los muchachos. Por suerte mi mamá se solidarizó y vino a socorrerme. De todas formas, su socorro no evitó que me estafaran.Me cago en el gremio fletero.
2. Vomité tres veces entre las 8 y las 11 de la noche. Primero vomité el sandwich de jamón y queso con papas fritas y mayonesa en pan lactal que había comido después del partido de Tomi. Es un dato importante, porque estábamos al aire libre y hacía frío (aún así, las papas fritas no estaban húmedas). Después vomité el agua con limón que había tomado para sacarme las náuseas, y hacia el final, bilis. Y más tarde, después de tomarme un reliverán (y mientras le decía a T ya sé que esto también lo voy a vomitar), el reliverán, el agua para bajar el reliverán, y más bilis, y hacia el final ya vomitaba el mismo vacío, porque no tenía más nada para vomitar.
3. El domingo me sentía mal, así que volví a los brazos de mi madre, que se quedó conmigo toda la tarde mirando películas, hasta que se hizo de noche y me dijo que me quedara a dormir.
Hoy todavía me sentía medio mal así que no fui a trabajar. Me quede a hacerle frente a la situación, nomás.
1. Se nos rompió el auto mientras lidiábamos con los fleteros australopithecus. En ese momento bisagra, T se quedó a esperar la grúa, y yo me fui a vérmelas con los muchachos. Por suerte mi mamá se solidarizó y vino a socorrerme. De todas formas, su socorro no evitó que me estafaran.Me cago en el gremio fletero.
2. Vomité tres veces entre las 8 y las 11 de la noche. Primero vomité el sandwich de jamón y queso con papas fritas y mayonesa en pan lactal que había comido después del partido de Tomi. Es un dato importante, porque estábamos al aire libre y hacía frío (aún así, las papas fritas no estaban húmedas). Después vomité el agua con limón que había tomado para sacarme las náuseas, y hacia el final, bilis. Y más tarde, después de tomarme un reliverán (y mientras le decía a T ya sé que esto también lo voy a vomitar), el reliverán, el agua para bajar el reliverán, y más bilis, y hacia el final ya vomitaba el mismo vacío, porque no tenía más nada para vomitar.
3. El domingo me sentía mal, así que volví a los brazos de mi madre, que se quedó conmigo toda la tarde mirando películas, hasta que se hizo de noche y me dijo que me quedara a dormir.
Hoy todavía me sentía medio mal así que no fui a trabajar. Me quede a hacerle frente a la situación, nomás.
miércoles, abril 14
Lo bueno de que te hayas ido es que indefectiblemente va a llegar el día en el que volvés, entonces mientras voy tachando tick-tick en mi almanaque mental los días que van pasando, hasta que voilá: el día D. Es como cuando encontrás una cucaracha en un rincón de la cocina y no tiene escapatoria, eventually la vas a acorralar; bueno, en ese sentido el domingo está acorralado porque dentro de cuatro días ya llegás, nos vamos a ver de nuevo y te voy a abrazar.
Pero igual, te extraño un montonazo.
Como doscientos cuarenta y siete paquetes de mogul.
Pero igual, te extraño un montonazo.
Como doscientos cuarenta y siete paquetes de mogul.
domingo, abril 11
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