martes, enero 6

Django

Tengo una cantidad de sueño que no se puede creer.

Me desperté con unos rulos que no se puede creer.

Me preparé un cafe au lait que no se puede creer.

Un mail en mi casilla que *adiviná* (seh, no se puede creer).

Después de diciembre vienen cosas muy fantabulosas.

Si las regás, tenés una vuelta gratis. Y te pasan Amadou & Mariam de fondo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Diciembre es como una gripe, una por año se banca y hasta te puede hacer bien. Lo bueno es que ahora falte tanto.