1. Se casó una gran amiga (el sábado rompemos todo)
2. Alquilé un departamento
3. Nació Elisa, la primer sobrina de T
4. En tres días me voy de vacaciones (!!!!!)
5. Cumplió T y me disfracé de Nalga, digo Nala
6. Mi mamá se fue de viaje a un lugar muy muy lejano (y la verdad es que la extraño)
7. Hicimos una exposición con los del taller y vendí dos cuadros
8. Me anoté en un posgrado en la facultad
9. Ayer me comí una torta de maracuyá (base de marquise, merengue y almíbar de maracuyá) que es simplemente indescriptible, y que después del primer bocado mantuvo mis glándulas salivales secretando saliva y provocándome ese dolor tan particular que es mezcla de placer-dolor hasta que terminé de comerme la porción. Y la segunda, no sin antes preguntarle a Dora que me dijera la receta y me mostrara cómo era la botella de maracuyá que había comprado en el barrio chino.
También lloré mucho con picos alternativos de alegría y de tristeza inconmensurable que me hacían sentir miserable y próxima a la muerte. Lo cierto es que la felicidad y la tristeza absoluta suelen tener asidero en las mismas cosas. Todo depende de cómo lo mires.
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1 comentario:
Son todas muy lindas noticias. Agrego que, a veces lo mismo que nos puede causar esa sensación de plenitud en simultáneo nos regala algo de tristeza. Una no es sin la otra...o algo así.
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