Es bastante clásico eso de mirar para atrás y tratar de imaginarnos cómo serían las cosas si hubiésemos tomado otras decisiones. O qué pasaría si fueras otra persona y te encontraras con vos misma. Serías tu amiga? Qué opinión tendrías de vos misma, qué te dirías?
Consejo a mi misma, a los 4 años:
1. Ahora te cuesta entenderlo, pero es normal que tu mamá se vaya a trabajar. No hagas tanto berrinche por eso, no tiene sentido y además después te duele la cabeza. Ya sé que te cuesta lidiar con tu abuela, que habla raro y no le entendés nada, pero en vez de enojarte tanto con ella, que no tiene la culpa, aprovechá que podés mirar tele todo lo que quieras y comer patitas de pollo con puré. No sirve de nada que te agarres de las rejas del portón y que llores como una marrana. Tu mamá se va a ir de guardia de todas formas. Tampoco sirve que te pongas al borde de la pileta y que amenaces a tu abuela con tirarte si no vuelve tu mamá. Además de ser peligroso, si te caés ella no va a poder sacarte. Y menos tus hermanos, que se la pasan jugando con los G.I. Joe y los Transformers.
2. Leticia es mala. No te irrites si le arranca el tapizado al auto, no tiene sentido. Es mala y no tiene remedio. Cuando tengas 27 te la vas a cruzar en el charter y vas a entender lo que te digo.
3. No te comas las tizas. Esa leyenda urbana de que son dulces es mentira. Si insistís con eso de incitar a los demás a que también lo hagan te van a mandar a dirección. Hacéle caso a la maestra que es buena onda.
4. No pasees al conejo con correa porque lo vas a ahorcar. Tampoco lo bañes ni lo metas adentro del cochecito -a vos te gustaría que te trataran así?
5. Vení, dame un abrazo. Vamos a pasear? Me encantan tus colitas.
martes, noviembre 17
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario